Persiguiendo el Sueño Olímpico, Frank Shorter llegó al Estadio, Olímpico recibiendo abucheos de la multitud.
Uno de los momentos más extraños de los Juegos Olímpicos de Munich 1972 (un evento que envolvió la masacre terrorista, donde fueron asesinados once miembros de la delegación israelí) fue cuando el campeón de maratón, Frank Shorter llegó al estadio olímpico recibiendo abucheos de la multitud.
¿La razón? Frank Shorter no la comprendía, por su cabeza no pasaba ni una chispa de razón para comprender los motivos de los gritos que el pensaba se levantaban en su contra.
¿Cual era el motivo de los abucheos generalizados, las causas que originaron la reacción negativa del Público?
Un joven estudiante de nombre Norbert Sudhaus interrumpió los últimos metros de la competencia de la Maratón Olímpica, poco antes de la entrada triunfante de Frank Shorter al Estadio Olímpico de Múnich, en ese justo momento el espontaneo era expulsado por la seguridad y al mismo tiempo abucheado por la gente que se encontraba dentro del Estadio.
Entonces entró al recinto Frank Shorter, para escuchar la peor parte y sufriendo un total desconcierto al llegar de esa manera a la meta.
El estadounidense logró detener el cronómetro en 2:12:19, llevándose la medalla de Oro Olímpica pero nunca más olvidaría ese momento por razones obvias.
La vida de Shorter siguió ligada al deporte de diferentes maneras: fue presidente de la Asociación Antidopaje de Estados Unidos (USADA, por sus siglas en inglés) entre 2000 y 2003.
Actualmente dedica buena parte de su tiempo a combatir el maltrato infantil, como del que fue objeto a manos de su padre.
Fuente: Karen Sánchez Bahena
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